Se vehiculiza la grasa con un agente inyectado y posteriormente se utiliza ultrasonidos de alta frecuencia que ayuda igualmente a drenar la grasa.

Los ultrasonidos son ondas de frecuencia que generan un efecto mecánico, porque vamos a romper la fibrosis que se produce en la zona. Un efecto mecánico térmico estimulando la circulación sanguínea y linfática. Un efecto mecánico y químico porque vamos a oxigenar la zona y oxidar la grasa y un efecto mecánico de cavitación. Se rompe el adipocito liberando la grasa, los triglicéridos, ácidos grasos y glicerol que son fácilmente eliminables por el sistema linfático y circulatorio.

Después de este proceso, se reafirma con la Diatermia Lavatron.